Ayer me empezaron a contar un cuento, en que un rey promete pagar por hacer un trabajo, librar a un pueblo de una plaga de ratas, trabajo desagradable que no quería hacer nadie. Se encargó de ello una persona que una vez finalizado el trabajo pactado, quiso cobrar lo que se le debía, como nos pasa a todos.
Entonces el rey decidió que para qué iba a gastar un dinero si ya tenía el problema solucionado. ¡¡¡ Qué iba a poder hacer el músico!!! , ¿cantar más fuerte?.
El final no me lo contaron, está a mitad. Yo que me sé el cuento, os adelanto que después los niños lloran porque se les separa de sus padres. Claro que esto al rey no le importa, porque no tiene hijos.
Hoy por la mañana ha continuado la historia, pero todo esto no es cuento. Mikel Castillejo, que vivía en Biurrun volvía a casa andando desde Tiebas después de pasar un dia de fiesta en Sanfermines. Había oído lo de "Si bebes no conduzcas", y a pesar de su juventud era muy responsable. Ahora la historia será al revés, no son las niñas quienes desaparecerán, sino el padre, y las hijas y mujer llorarán sin consuelo que puedan darles su familia y amigos.
Y aquí estoy yo, presente en el cuento realmente, y por eso lo comento. La familia la conozco desde hace muchos años, y desde hace dos años sobre todo a la madre y a la niña mayor, que he seguido y cuidado, intentando ayudar a sus padres a que creciera y aprendiera desde mi faceta de maestra. Mucho lo tiene adelantado porque su familia es ejemplar en el cuidado y educación de los niños, crianza con mucho sentido común, cosa que actualmente echamos mucho en falta. Luego iré a daros un abrazo y un beso. Ahora deberán afrontar una falta irreparable, y aunque el rey me pague lo que debe (cosa que espero), ya nunca volverá Mikel a casa. Y es que los cuentos no son bonitos en la vida real.
4 comentarios:
Hola querida Marisa:
Madre mía que fuerte.
Pobre familia.
No tengo más palabras.
Recibe besos desde Valencia, Montserrat
Estimada Marisa ,vuelvo a llorar despues de haber leido el cuento y digo vuelvo a llorar por que llevo dos dias llorando por mi sobrino Mikel ,por su muerte tan injusta , por la forma tan irreal de todo lo sucedido y sobre todo por la rabia de que cuando uno es responsable ,como tu dices,le sale todo al reves .Que injusta es la vida ,no se lo merecia toda una vida por delante con sus hijas y su mujer .No paro de llorar y llorar y pensar que vuelta nos da la vida en unos minutos. MIL besos para ellas tres .Toni .
Estimada Marisa ,vuelvo a llorar despues de haber leido el cuento y digo vuelvo a llorar por que llevo dos dias llorando por mi sobrino Mikel ,por su muerte tan injusta , por la forma tan irreal de todo lo sucedido y sobre todo por la rabia de que cuando uno es responsable ,como tu dices,le sale todo al reves .Que injusta es la vida ,no se lo merecia toda una vida por delante con sus hijas y su mujer .No paro de llorar y llorar y pensar que vuelta nos da la vida en unos minutos. MIL besos para ellas tres .Toni .
Han pasado casi dos meses y ni un sólo día he dejado de pensar en Mikel. Lágrima, tras lágrima, en silencio, van pasando los días y miro al cielo y sueño que madre e hijo estén juntos, cuidando de su mujer e hijas en este mundo tan injusto.
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