Este primer fin de semana de primavera nos trae muchas
cosas. Nos trae catalanes y madrileños,
quienes en sus comunidades celebran ya la Semana Santa. Tal vez algunos vengan
a visitar Navarra y ocupen plazas en casas rurales y hoteles, que falta hace.
Pero mientras por las carreteras tendremos más tráfico.
También
nos trae este sábado, como muchos otros, una manifestación en Pamplona. Hay
mucha gente pasándolo mal y los que pueden hacer algo parece que no toman nota.
Si acudís podréis pasar por el nuevo puente sobre el rio Sadar que al final ha
terminado de construirse, y deja libre la avenida de Zaragoza desde el
principio hasta el final. No sé por qué habrá costado tanto tiempo. Por dinero
no creo. Lo saben bien los cientos de personas a las que se les denunció
injustamente por romper unos bolardos de piedra situados frente al antiguo
Pamplonica, que sin ser reparados, servían año tras año para denunciar nuevos
incautos, que indemnizaban (vía seguro) la “reparación” de dichos
bolardos. Lo sé de buena tinta, a través
de una compañía de seguros que pagó más de uno y de dos.
También el buen tiempo nos invita a salir al campo. Este fin
de semana, mañana domingo, tenemos una carrera de Enduro, de las que se vienen celebrando tradicionalmente
ya en Añorbe. Los que quieran podrán correr con su moto, y para la mayoría de
nosotros, tenemos la posibilidad de salir al campo, por el recorrido marcado, y
ver sus vueltas por sendas y terraplenes.
Para quienes tengan una conciencia más ecológica esta tarde
nos trae un apagón mundial, de 8 a 9 de la noche, en protesta y para llamar la
atención sobre el cambio climático.